La activista LGBT Christina Fonthes envió por Twitter una llamada de auxilio desde Kinshasa donde pasaba unas vacaciones con su familia, alertando de que su madre estaba entregandola a un grupo congoleño que “arregla” la homosexualidad.
Christina Fonthes es públicamente lesbiana, congoleña, y doblemente orgullosa. "Sí, soy congoleña; sí, soy gay; y sí, mi familia lo sabe!" la joven de 27 años de edad, escribe en su blog, http://musingsofacongoleselesbian.wordpress.com/about/ (las reflexiones de una lesbiana congoleña). Pero la línea que sigue puede ser clave: "Bueno, la mayor parte de mi familia ..."
Según los que la apoyan, Fonthes, una ciudadana británica, está siendo retenida contra su voluntad en la República Democrática del Congo después de un viaje para visitar a la familia se convirtiese en un intento siniestro para "curar" su homosexualidad.
La madrugada del jueves, Fonthes envió un pedido de ayuda en Twitter a una organización con la que ella trabaja. "Por favor revise su correo electrónico urgentemente!!!!!!" Más tarde, ella twitteó de nuevo, escribiendo, "Mi pasaporte ha sido robado por mi madre y tengo que volver al Reino Unido lo antes posible".
De acuerdo con amigos y colegas que trabajan en su liberación, Fonthes estaba de vacaciones con su madre y su hermana en la República Democrática del Congo cuando su madre le confiscó el pasaporte y la llevó a una organización que afirma que “arregla” la homosexualidad.
"Se hizo evidente que su familia no estaban contentos con su decisión de ser una lesbiana fuera del armario", su pareja, la periodista Jessica Creighton, dijo a The Independent. "Se llevaron el pasaporte y se han negado a devolverselo. Ellos han dicho que quieren mantenerla en Congo y 'curarla de su homosexualidad' ".
Fonthes era mantenida en la casa de su tía, de la cual huyó y luego buscó refugio con un amigo antes de acudir a la embajada británica en Kinshasa, desde donde se reporta que recibió información, asesoramiento jurídico, documentos de viaje, y los vuelos.
No está claro por qué entonces abandonó la embajada, pero en su camino de regreso, tanto ella como el amigo que la albergaba su fueron arrestados por la policía congoleña. Su madre, que había denunciado su desaparición, tuvo a Fonthes bajo su custodia de nuevo una vez liberada por la policía. Ranbow Noir, la organización para la que trabaja Fonthes, confirmó que Fonthes habían sido liberada por las fuerzas del orden y entregada a su familia.
"La vida de Christina todavía está en peligro muy real" escribió su amigo y activista LGBT Primos Chloe en Facebook.
Tanto las Oficinas de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth en Londres como la embajada Británica en Kinshasa sólo confirmarían que "están proporcionando asistencia consular a una ciudadana británica en la República Democrática del Congo". Una fuente que sigue el caso señaló que esta declaración indica Fonthes en realidad no había sido arrestada.
Ellos están dirigiendo sus preguntas a la guía de apoyo en viaje del Reino Unido, que señala que puede emitir documentos de viaje de emergencia y hacer arreglos especiales de emergencia. No puede, señala, "garantizar su seguridad y la seguridad en otro país", o "involucrarse en disputas privadas."
La activista con sede en Manchester nació en Kinshasa, pero creció en la ciudad de Londres.
Online, Fonthes escribe con un conciencia social, escribiendo artículos que condenaban la falta de diversidad en el Festival de Cine LGBT de Londres, y criticando la brutalidad policial en Hollywood. En su blog, ella atribuye a su herencia congoleña que impregna todos los aspectos de su vida y provoca una declaración de intenciones del estilo: "Este blog es un espacio seguro – no es un aula- para mí en el que puedo hablar, celebrar, y compartir mis múltiples experiencias e identidades como joven, gay y mujer congoleña".
Fonthes llegó a Kinshasa el 11 de agosto Tres días después, ella retutiteó una simple frase reveladora: "La familia es dura". Ella también hizo alguna investigación interesándose si había espacios queer en Kinshasa, al parecer sin suerte.
Aunque la homosexualidad es legal en la República Democrática del Congo, las personas LGBT se enfrentan a una discriminación generalizada. El año pasado, un borrador de un proyecto de ley que penaliza la homosexualidad fue presentado a la Asamblea Nacional del Congo. Se propone penalizar los actos homosexuales con tres a cinco años de prisión y una multa de $ 1,000.
De acuerdo con el perfil Fonthes en LinkedIn, se graduó en la Universidad de Sussex en 2009 antes de hacer un programa de post-grado en la Universidad de la Ciudad de Londres, centrando sus estudios en lengua extranjera, traducción e interpretación. Ahora se encuentra haciendo prácticas profesionales, traduciendo francés, lingala e Inglés.
Luego ayudó a fundar Rainbow Noir, una organización que se anuncia como un refugio seguro para las personas LGBT de color en Manchester. También se desempeña como coordinadora de voluntarios para un proyecto de recolección de historias orales de la comunidad congoleña en Gran Bretaña.
La intensa participación Fonthes en el trabajo activista parece estar ayudando a su causa en el intento de encontrar alguna vía para que pueda salir de la República Democrática del Congo.
Después de una campaña de Twitter, una avalancha de tweets con el hashtag #ChrisFonthes llevó su caso a la atención de Stonewall, una organización benéfica derechos de los homosexuales, y al político de Manchester Kate Green (que no respondió a las solicitudes de información de esta periodista). Pero después de un día, los partidarios cambiaron de tono en las redes sociales. La petición de Change.org a la Embajada del Reino Unido que abogaba por la atención en el caso fue cerrado, después de 516 firmas. Un amigo y compañero de Manchester activista cuya cuenta de Twitter es @Pkakooza, escribió una nota explicando que el apagón fue por la seguridad Forthes, y que la atención podría ponerla en más peligro.
La República Democrática del Congo puede que no sancione legalmente la homosexualidad, pero la friolera de 42 de los 53 países de la Commonwealth Británica, (NdT: Organización que agrupa a la mayoría de los países que fueron parte del Imperio Británico), lo hacen, este hecho está ampliamente considerado como un vestigio de la época colonial. Esta discriminación sancionada por el Estado ha obligado a un número incalculable de personas LGBT a vivir ocultos por temor a la persecución. Fonthes ha atraído la atención sobre el precio que se puede tener que pagar por estar orgullosamente fuera del armario, pero esperemos que esta atención pueda permitirla seguir brillando mucho más ampliamente.
(Traducción propia para ÁfricaLGBT gracias a nuestro voluntario MadridMars. Puedes leer el idioma original en el enlace adjunto).
http://www.thedailybeast.com/articles/2014/08/29/lesbian-brit-kidnapped-to-be-cured-in-congo.html