Ikechukwu, un joven nigeriano, aseguró que fue acosado, amenazado y acusado de homosexualidad por los oficiales de la fuerza de policía de Nigeria, quienes más tarde le extorsionaron exigiéndole dinero de él.
Este incidente demostraría que la policía de Nigeria ha interpretado la ley anti-gay del país como una autorización para extorsionar dinero de ciudadanos nigerianos inocentes.
La víctima contó al podcast NoStrings que, hace dos semanas aproximadamente, estaba andando con un amigo alrededor de Festac Town en Lagos, cuando se le acercaron dos oficiales de policía que le pararon para interrogarle. Entonces, cogieron su teléfono, indagaron entre sus contenidos y le acusaron de homosexualidad.
Después, la policía le puso bajo custodia, y le detuvieron durante cinco días antes de que le pidieran que pagara la suma de 105.000 naira (334,3 €) o que se enfrentara a los cargos de homosexualidad.
Ikechukwu (un pseudónimo usado por Erasing 76 Crimes para proteger la identidad de la víctima) no podía permitirse pagar la cantidad requerida, así que decidió enfrentarse a los cargos en la Corte.
Los cargos fueron archivados, pero más tarde fueron retirados por la policía después de que recolectaran una cantidad más pequeña de dinero de Ikechukwu.
En este incidente, la policía habría violado varias leyes. Es ilegal para la policía detener a una persona por más de 24 horas, pedirle un soborno, o acceder a los contenidos del teléfono móvil de una persona sin autorización.
En una declaración en 2015, Solomon Arase, el inspector general de policía de Nigeria, advirtió a los oficiales de policía de desistir de la obtención indiscriminada de información personal en teléfonos móviles de personas.
Él también recordó a los oficiales que hay que asegurar la protección de los derechos de los civiles a la privacidad y la vida familiar, como viene recogido en la Constitución de Nigeria. La sección 37 de la constitución establece que “La privacidad de los ciudadanos, sus hogares, correspondencia y conversaciones telefónicas es, por el presente acto, garantizada y protegida”.
Claramente, el derecho a la privacidad de Ikechukwu habría sido violado.
Este es un caso clásico de violación de derechos humanos. El inspector general de la fuerza de policía de Nigeria debería responder advirtiendo a la policía de comportarse y penalizar a los oficiales infractores.
Traducción propia para ÁfricaLGBT gracias a nuestra voluntaria Minerva Expósito Guixeras. Puedes leer el artículo en su lengua original en el siguiente enlace:
https://76crimes.com/2016/06/25/nigerian-police-extort-money-from-man-they-claim-is-gay/